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En un reporte de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE por sus siglas en inglés), en conjunto con la Agencia Internacional de Energía (IEA por sus siglas en inglés) publicado el año pasado, se analiza la cantidad de mujeres en posiciones de liderazgo dentro de las compañías. Y compara 30.000 empresas fuera del ámbito de la energía, con 2.500 empresas de la industria energética.
Aquí algunos datos relevantes:
En sectores relacionados con la energía las mujeres representan menos del 14% de los altos directivos, con una representación más fuerte en el sector de los servicios públicos.
Excluyendo los servicios públicos, las mujeres ocupan menos del 12% de los puestos de liderazgo.
Sorprendentemente, las empresas de energía renovable están muy por debajo del promedio compuesto con solo un 10,8%,
y solo un poco más arriba que el sector del carbón, que tiene la representación más baja con un 10,6%.
Las mujeres representadas en las empresas de petróleo y gas es del 12,1%, mientras que las empresas en el subsector de equipos y servicios de petróleo y gas fueron ligeramente superiores al 13%.
Esto es particularmente evidente en el sector de la energía, donde más del 25 % de las empresas no muestran pruebas de que haya mujeres en la alta gerencia, lo que sugiere una distribución sesgada con muchas empresas que tienen una representación femenina baja (o nula).
Los datos disponibles ahora sobre la comprensión de las brechas de género en el sector energético son limitados. Es por eso que la Agencia Internacional de Energía ha asumido el papel de Coordinador de la Iniciativa Internacional de Energía Limpia, Educación y Empoderamiento (C3E international).
Fuente: IEA
Está bien documentado que las mujeres en puestos de liderazgo permiten a las empresas maximizar el poder de las diversas perspectivas y la toma de decisiones innovadoras, lo que mejora el éxito general del desempeño de una empresa. Según Bank of America Global Research, las empresas del índice bursátil S&P500 con mujeres en la alta dirección por encima de la mediana experimentaron un rendimiento sobre el capital un 30% más alto y un riesgo de ganancias un 30% más bajo en relación con sus pares de menor rango.
Es una realidad que habrán pocas mujeres en el rubro, si es que pocas mujeres estudian carreras de ciencia, tecnología, ingeniería o matemáticas (STEM, por sus siglas en inglés).
Datos y Cifras del Ministerio de la Mujer y Equidad de Género de Chile
52,6% de quienes rindieron la Prueba de Selección Universitaria (PSU) en 2019 fueron Mujeres.
El 53% de las matrículas de Educación Superior corresponde a mujeres.
20% de matrículas en el área de Tecnología en 2018 corresponde a mujeres.
Tres carreras con alta participación de mujeres: Educación básica, Educación Parvularia y Enfermería, tienen una remuneración promedio al segundo año de egreso de $814.315 pesos. En tanto, carreras con alto porcentaje de hombres como Ingeniería Civil Eléctrica, Ingeniería civil Electrónica e Ingeniería en Computación e Informática, tienen un ingreso promedio al segundo año de egreso de $1.408.522 pesos. Es decir, una brecha de 594.207 pesos (-42,1% diferencia).
Sólo el 9% de las matrículas 2018 en Ingeniería Eléctrica corresponde a mujeres.
Así, los esfuerzos por abrir espacios a las mujeres en los puestos de liderazgo han sido muchos, sin embargo, aún existe una gran oportunidad, principalmente en el sector energético.